El
Teniente, un viaje a las entrañas de la Tierra
El trazo del tour se iniciaba desde Santiago hacia Rancagua y
desde ahí unos 50 kilómetros hacia la
cordillera. La mina el teniente, llevaba
sobre sus hombros el honor de ser la mina subterránea más grande del mundo y
además el orgullo de ser una mina
estatal, que era una verdadera proeza en
un país neoliberal en donde todo lo que
es rentable está en manos de privados , generalmente extranjeros. Después de pasar a la altura de Coya, un
pequeño pueblo minero, se iniciaba la pre-cordillera andina.
La escaza vegetación presente se extinguía
para dar paso a enormes macizos con
pequeñas manchas de nieve (era inicios
de primavera). Aquellas enormes montañas pedregosas, estaban cruzadas por oxidados rieles de trenes en
desuso, que se resistían al paso del tiempo como queriendo demostrar aún que en
aquellas tierras difíciles la vida
obrera, minera y trabajadora fue algo más que una anécdota para turistas
curiosos.
Entre relaves,
camiones y rieles se podía apreciar al
fondo un gran cerro semipoblado, de curiosas casa de colores, como sacadas de
un cuento. Era “sewell”, la deshabitada cuidad minera patrimonio de la
humanidad. Un par de kilómetros antes se
encontraba la mina el teniente. Cuando atravesamos en el bus el túnel principal
a la mina, se podía apreciar una gran oscuridad, que sumada al fuerte eco de
los camiones mineros generaba un
ambiente estremecedor.
El cerro en el que se
encuentra ubicada la mina, se eleva por sobre los 2300 metros sobre el nivel
del mar. Los túneles estaban perfectamente construidos, lo que daba una
relativa sensación de seguridad. En ese momento me costaba asimilar que aquella
mina había sido explotada desde tiempos prehispánicos. En la actualidad el paisaje había sido casi
mayoritariamente modificado por el hombre y su tecnología.
Mientras observaba
las construcciones internas, la monitora del tour iba relatando la historia de
la mina. Recuerdo que mencionó a una familia extranjera gringa dueña de la mina
en sus inicios, pero que en la nacionalización del cobre llevada a cabo por el
gobierno de Salvador Allende, había pasado en su totalidad a manos estatales. La
mención de ese momento histórico, me estremeció de orgullo.
Estaba comenzando a
medir la dimensión real y concreta de lo que significaba que nuestro país fuera
saqueado por empresas trasnacionales que se llevaban los recursos naturales
pagando míseros impuestos, de los cuales muchas veces eran eludidos a través de
vacíos legales.
"Cueva de Cristales. Mina El Teniente"
Codelco actualmente
produce el 34% del cobre en chile, mientras que el 66% restante es producido
por empresas mineras extranjeras privadas que pagan un impuesto a la renta de
un 20%, muy por debajo de los países “desarrollados” que exigen a las empresas
impuesto a la renta de aproximadamente el 40%. Se estima que la vida útil del
Teniente durará unos 80 años. Cerca de las 14:00, después de haber almorzado en
el casino de la mina, salimos en dirección a Sewell...